El 16 de octubre se celebra el Día Mundial de la Alimentación, establecido por la FAO en 1979 para concienciar sobre la importancia de la seguridad alimentaria y la nutrición. Este día tiene como objetivo fomentar acciones para erradicar el hambre y garantizar el derecho a la alimentación para todas las personas.
En la actualidad, 733 millones de personas sufren hambre y 2800 millones no pueden acceder a una dieta saludable. Esta situación es especialmente preocupante entre quienes trabajan en el sector de la agricultura produciendo los alimentos que consumimos, lo que revela una paradoja alarmante.
Las pequeñas explotaciones, que representan el 95% de las fincas a nivel mundial y producen un tercio de los alimentos, son fundamentales para combatir la inseguridad alimentaria. Sin embargo, el cambio climático amenaza esta producción con sequías, plagas…, poniendo en riesgo cultivos esenciales.
La Coordinadora Estatal de Comercio Justo nos lo recuerda en este artículo en el que señala la urgencia de impulsar un cambio de modelo global que garantice el derecho humano a la alimentación, alineado con los principios de sostenibilidad y dignidad.
Desde Setem defendemos un modelo de producción, distribución y consumo de alimentos basado en sistemas de producción agroecológica y en relaciones de confianza y cercanía. Asimismo, promovemos el Comercio Justo como alternativa comercial necesaria para garantizar el cuidado de la tierra y el respeto a los Derechos Humanos de quienes la cultivan.
En el Día Mundial de la Alimentación, ponemos el foco en la importancia de cuestionar los modelos imperantes de producción y consumo, y nos sumamos a la campaña #DDHHyComercioJusto en redes sociales.
Te animamos a sumarte tú también, y a reflexionar sobre el modelo de producción de alimentación global que quieres impulsar con tu compra.
¡Elegir alternativas que respeten los ciclos de la naturaleza y los derechos laborales de quienes trabajan la tierra es posible!