Café de Comercio Justo en nuestra tienda

¿Qué esconde la subida de precios del cacao y el café?

10/Abr/2025 | Noticia

Si os gusta y disfrutáis de un buen café o del chocolate, habréis notado que su precio lleva varios meses subiendo. Detrás de esta escalada que afecta a nuestros bolsillos, hay una serie de causas y consecuencias que nos recuerdan que la producción de estos productos, tan consumidos y valorados en occidente ocultan una realidad de especulación, daño medioambiental y precariedad laboral.

Hemos hablado con las importadoras que proveen a nuestra tienda de Comercio Justo de cacao y café, para poder conocer más de cerca esta situación. Las 3 marcas consultadas, Ideas, Alternativas 3 y Mundo Solidario, que trabajan directamente con agricultores/as locales de países productores, pagando justamente su trabajo y velando por sus Derechos Humanos, coinciden en su diagnóstico.

Chocolate de Comercio Justo en nuestra tienda

Chocolate de Comercio Justo en nuestra tienda

La principal razón para esta subida de precios es un desajuste entre la oferta y la demanda, o lo que es lo mismo, un consumo desmesurado de cacao y café por parte de los países del Norte, que genera una producción sin control y sin tener en cuenta otros factores como la sostenibilidad medioambiental. Esta situación, favorece la especulación del mercado de valores, que hace que el precio del café o el cacao suba, al haber una escasez de producción, con lo que, los intermediarios siempre consiguen beneficios económicos. Recordemos que actualmente los productores reciben entre un 3% y un 7% del precio de venta final de una tableta de chocolate, pero en la década de los 80 recibían el 16% y en los 70 recibían el 50%. Y es que los y las productoras de café y cacao viven una realidad basada en salarios ínfimos, pobreza, explotación laboral, precios por debajo de costes de producción…

La otra gran causa que tiene una relación directa sobre el precio son las consecuencias del cambio climático. Periodos de sequía, lluvias torrenciales, enfermedades de los árboles, plagas, cambios en patrones de lluvias… están provocando un descenso significativo en la producción de cacao. Los efectos de la desertificación y la sequía se notan en todo el planeta, pero quienes sufren de primera mano sus efectos son quienes viven de la agricultura en zonas rurales y particularmente en países en vías de desarrollo, precisamente donde se cultiva mayoritariamente estos productos.

Según datos de Naciones Unidas, hasta un 40% de la tierra del mundo ya está degradada, lo que afecta directamente a la mitad de la población mundial. Se calcula que 3.200 millones de personas en todo el mundo sufren los efectos negativos de la desertificación. Además, para 2050, se espera que más de tres cuartas partes de la población mundial se vea afectada por las sequías. El cultivo convencional de café y el cacao, o el aceite de palma, son algunos de los productos que más deforestación y deterioro de la tierra generan. Sin un plan para combatir el cambio climático, la superficie apta para el cultivo del café podría reducirse a la mitad en 2050. La superficie de bosque natural en Ghana y de Costa de Marfil, ha disminuido en más del 70% en las últimas tres décadas, debido al cultivo de cacao. ¿Cuánto llegará a valer entonces una tableta de chocolate?, pero peor aún, ¿podrá la población local de los países tropicales seguir viviendo del cultivo del cacao y del café si su ecosistema se destruye?

Toda esta situación nos preocupa y nos entristece terriblemente. Como sabéis, una de las principales áreas de trabajo de SETEM es promover el consumo de productos de Comercio Justo, ya que como reza su principio número 10 “las organizaciones productoras deben realizar una serie de prácticas respetuosas con el entorno natural y que minimicen los impactos ambientales como priorizar las materias primas sostenibles, usar plaguicidas y fertilizantes orgánicos o reducir el consumo de agua y energía”. Además, las organizaciones de Comercio Justo utilizan recursos adicionales a sus ingresos para desarrollar acciones de adaptación al cambio climático.

Desde SETEM apoyamos la formación a miembros de las cooperativas y entidades agrícolas, algo esencial para definir las estrategias de sostenibilidad más adecuadas a desarrollar ante los efectos del cambio climático.  Estas organizaciones luchan para reivindicar un precio digno por su producción, unas prácticas comerciales justas que incluyan el pago de salarios adecuados y estabilidad en las relaciones comerciales. Estas exigencias les generará una seguridad laboral con la que podrán hacer frente a los cambios necesarios en sus cultivos o procesos de producción.

Escaparate Tematico en nuestra tienda de CJ

Escaparate Tematico en nuestra tienda de Comercio Justo

Así pues, desde las entidades de Comercio Justo se ha trasladado a la Unión Europea que: “cualquier producto de soja, aceite de palma, caucho, café, cacao, madera y bovino, y sus productos derivados, que se quiera introducir en el mercado único europeo, o exportar fuera de él, debe garantizar que ha sido producido respetando la legislación del país de origen y que no ha provocado deforestación o degradación forestal”. Las organizaciones sociales y ambientales de toda Europa alertan que “las presiones de ciertos grupos de interés no deben condicionar la toma de decisiones democráticas en la Unión Europea” y recalcan que, ante la grave crisis ecológica mundial, hace falta valor y decisión para intentar frenar las consecuencias de este fenómeno.

Apostando por el Comercio Justo se puede comenzar a dar un paso hacia este tipo de políticas que benefician al medioambiente, a la producción, a las personas consumidoras y, consecuentemente, al precio que pagamos por estos productos.