¡Tú lo haces posible!

01/Oct/2018 | Noticia

Nos hace muy felices ser partícipes de proyectos que crecen y mejoran la vida de mucha gente en entornos difíciles. Los productos de Comercio Justo son elaborados con cariño y por eso a nosotras nos gusta compartirlos con igual mimo.

Las prendas de Global Mamas son originales y de calidad. Las diseñan y elaboran un grupo de mujeres de Ghana realizando los estampados de manera artesanal. Este verano estas mujeres decidieron poner sus nombres en las etiquetas para que, cuando te llevaras una prenda, pudieras mandarles un saludo. Y nos habéis dejado mensajes muy bonitos para ellas:

¡Me encanta vuestra ropa!

I feel pretty with this dress!

I will tell to the world how wonderful you are…

Enhorabuena por vuestro trabajo, ¡me encanta!

Thank you very much for creating these wonderful products!

A cambio, queremos contaros algunos de los cambios que se producen cuando tomamos la decisión de realizar un consumo responsable:

Global Mamas empezó con 6 trabajadoras y actualmente cuenta con más de 350 en toda Ghana. Se ha comprobado que, a lo largo del tiempo, cada mujer empleada termina dando trabajo a, por lo menos, otras dos mujeres. Los primeros gastos que realizan estas mujeres con sus salarios van destinados a enviar a sus hijos e hijas a la escuela y a gastos corrientes dentro de su comunidad, así como a temas prioritarios como salud.

La desigualdad de género, además de manifestarse  a nivel global a través de una brecha salarial del 20%, en los países en vías de desarrollo impacta en la vida de la mujer a nivel educativo, en el acceso a la atención médica, en la participación política y en la adquisición de bienes, en suma, en la búsqueda de independencia y de una vida propia.

Gracias a este proyecto las mujeres consiguen esta independencia económica: dejan de estar recluidas en el hogar, reciben formación, ganan su propio dinero y gestionan sus gastos. Consiguen salir del círculo de la pobreza, un fenómeno totalmente feminizado. Mira los testimonios de algunas de ellas en su web.

Son condiciones de vida justas a las que deberían poder tener acceso todas las mujeres. Por todo esto, ¡gracias por consumir con conciencia!

Si quieres conocer más productos de Comercio Justo que cambian vidas, sigue este enlace.

 

Autor: Aggi Cole-Arthur: “El dinero que gano está pagando la educación primaria de mi hija, la titulación de mi marido y, ahora, yo seguiré estudiando para aprender más cosas de mi profesión”.Autor: Molly Linda Djan: “He cambiado. Ya no dependo de nadie, soy independiente”.Autor: Patience Essibu: “Cuando nació mi hijo tuve que hacer frente a muchos problemas de salud. El permiso de maternidad me dejó tiempo para descansar y recuperarme sin estres por la posibilidad de perder mi empleo”.